El desprendimiento de tierra en el Argayo del Huerna, ocurrido el pasado 10 de noviembre, representó un desafío técnico de gran magnitud. En Posada, abordamos esta obra con una planificación precisa y una ejecución eficiente, garantizando resultados en tiempo récord. A continuación, explicamos los pasos clave de nuestra intervención para restablecer la operatividad de la AP-66.
Evaluación inicial y planificación
Tras recibir el aviso del incidente, nuestro equipo técnico se desplazó de inmediato al lugar para realizar una evaluación detallada del terreno. Este análisis incluyó:
- Determinación del volumen de material desprendido, utilizando tecnologías de topografía avanzada.
- Identificación de posibles riesgos adicionales, como inestabilidad en los taludes o áreas susceptibles de nuevos desprendimientos.
- Definición de las máquinas y equipos necesarios para llevar a cabo la operación.
Con esta información, diseñamos un plan de trabajo que optimizara los tiempos de intervención y asegurara la seguridad del equipo y la infraestructura.
Retirada de materiales y estabilización del terreno
La primera fase operativa consistió en la retirada controlada de las toneladas de
tierra y rocas acumuladas sobre la autopista. Este proceso se realizó mediante:
- Excavadoras de gran capacidad, que permitieron manejar grandes volúmenes de material de manera eficiente.
- Transporte del material retirado mediante camiones articulados, asegurando un flujo continuo de trabajo.
- Supervisión constante de los taludes para prevenir nuevos desprendimientos durante las labores.
Una vez despejada la carretera, pasamos a la instalación de sistemas de contención y refuerzo en los puntos críticos.
Reparación de la infraestructura
El daño estructural en la AP-66 requería una intervención precisa para garantizar la
durabilidad de la reparación. En esta etapa, ejecutamos:
- Reconstrucción de la plataforma de la carretera, asegurando una base
firme y estable. - Inspección técnica final para verificar la calidad de los trabajos realizados y
el cumplimiento de los estándares de seguridad vial.
Eficiencia y resultados
Gracias a una combinación de experiencia técnica, maquinaria de última generación y una coordinación impecable, completamos las labores en solo 17 días. Este tiempo reducido fue posible gracias a:
- Trabajo ininterrumpido en turnos rotativos, maximizando la productividad sin comprometer la seguridad.
- Optimización de recursos y procesos, evitando tiempos muertos y mejorando la eficiencia operativa.
El resultado fue una autopista completamente funcional y reforzada para resistir futuras contingencias.