La sociedad Vegalpa promovió esta compleja obra de demolición mecánica, que implicó el derribo de un edificio de 400 m² y 18 metros de altura. Para llevar a cabo los trabajos, se utilizó una retroexcavadora Hitachi ZX350 equipada con un brazo de 22 metros de alcance y cizalla, garantizando la precisión y eficiencia en cada etapa del proceso.
El proyecto presentó importantes desafíos debido a la ubicación del inmueble, situado en una zona céntrica de Gijón con fachada a tres calles estrechas: Avenida Schultz, calle Santa Justa y calle Suerte. Estas condiciones limitaron significativamente el acceso y la maniobrabilidad de los equipos, exigiendo una planificación minuciosa y una coordinación rigurosa para minimizar el impacto en el tráfico rodado y garantizar la seguridad de las operaciones.